Si mi memoria no falla, fue un nueve de julio cuando me senté delante del ordenador para crear este blog. En aquella época era uno de los soportes más habituales de comunicación
Un día como hoy me despido de esta particular bitácora que con tanto cariño comencé en 2011
A veces cuesta acostumbrarse al paso vertiginoso del tiempo
La motivación de este blog ha sido aportar algo positivo a quien pudiese recoger mis palabras en cualquier parte del mundo, como así ha sido cada mes
Y es que el metaverso tiene la magia de conectarnos en la distancia y de que cualquier persona en la intimidad de su casa pueda convertirse en un medio de comunicación para compartir lo que quiera
Pero el lado perverso del universo digital es ser el distractor de la sociedad actual cada vez con más demencia digital e infoxicación; y el patio de recreo de personas mal intencionadas: los haters, hackers, and so
En los últimos 7 años yo he sufrido tres hackeos (el último recientemente). Es lo que tiene conocer la fórmula secreta de la Coca- cola 😉y eso que suelo blindar mis cuentas y tengo aplicaciones y antivirus que me advierten de actividad inusual
Lo cuento como última reflexión en este blog
A veces, online y offline abrimos una puerta, sin saberlo, a personas con la intención clara de hacer daño y manipular realidades
Y en general hoy somos más vulnerables por la irrupción del mundo digital. El hackeo y la inteligencia artificial son dos poderosas armas para ello
Aún así la vida merece la pena ser vivida a pleno pulmón y aferrarse a ella más allá de una pantalla: oliendo las nubes, pisando la hierba recién cortada, compartiendo conversaciones delante de un té con leche, abrazando a la familia, agradeciendo cada segundo de aliento, elevando(te) con tu equipo a favor... y recordando un mensaje que una vez me envió una persona muy inteligente que siempre lograba sus objetivos: por nada del mundo hay que perder la dignidad
Muchas gracias por haberme leído
La vida efímera y tan bonita